CAMINANDO JUNTOS HACIA EL OLVIDO: ALZHEIMER Y DETERIORO COGNITIVO EN HUMANOS Y PERROS
CAMINANDO JUNTOS HACIA EL OLVIDO: ALZHEIMER Y DETERIORO COGNITIVO EN HUMANOS Y PERROS
Imagen cortesía de Pexels
Hola Mi nombre es Annie Bernal, quiero presentarme y contarles que soy Terapeuta Ocupacional, y facilitadora de actividades asistidas con animales, actualmente trabajo con Adultos Mayores y hoy quiero presentarles está sección que se llama Conectando Huellas 🐾, un espacio donde podremos conectar la vida los seres humanos y los animales, así como hablar de las ocupaciones significativas y el sentido de vida que tenemos como seres vivos....
En este mes de septiembre quiero tocar el Día Mundial del Alzheimer con un punto de vista muy particular, comenzaré contándoles que mi primer contacto con esta enfermedad fue a través de mi abuela materna, que sin yo saberlo, presentó está enfermedad y falleció a consecuencia de dicho padecimiento cuando yo era una niña. Les cuento que de ella recuerdo muchas cosas lindas, por ejemplo: todos los domingos nos visitaba en casa con un obsequio, cosa que, como niña pequeña me hacía muy feliz; pero en un determinado momento mi abuela comenzó a tener conductas extrañas, y derivado de ellas se fue a vivir con nosotros a casa. Volvió a ser como una niña, se escondía, se escapaba de casa e incluso llegó a perderse por unas horas, ésta situación se convirtió en algo insostenible para la familia y por ello se tuvo que pedir ayuda profesional en una estancia para personas mayores con problemas de salud mental.
Fue ahí cuando perdí contacto, solo supe de ella tiempo después, cuando nos avisaron que había fallecido. Esta fue mi primera pérdida humana.
Analizando ahora, puedo concluir que siendo una niña fui muy grosera e impaciente con mi abuela, no sabía que yo estaba atravesando por un proceso de duelo por todos los cambios que su enfermedad representó, y no solo yo, lo vivimos toda la familia a su alrededor, no supimos cómo lidiar, ni cómo afrontar esa situación. Ahora, varios años después de lo sucedido, a través de mi profesión tengo la oportunidad de conocer a varias personas con este diagnóstico y en algunos casos a sus familias, lo que me hace reflexionar sobre el duelo que se vive al atravesar un diagnóstico como este, el Alzheimer.
Hoy tengo la conciencia y comprensión necesaria para ser tolerante, empática y de crear un ambiente de comodidad para los pacientes y sus familias, porque es lo que ellos necesitan…
Los signos pueden variar, dependen de la personalidad de cada paciente, pero el común denominador es el deterioro cognitivo, la confusión y sobre todo la incapacidad para crear nuevos recuerdos, ellos se quedan en otra etapa de sus vidas y poco a poco van perdiendo funciones esenciales para mantenerse independientes y autónomos. Es aquí donde les cuento el caso de una paciente, siempre que la veo me narra la misma historia sobre sus perritas Pily y Mily, fue tan importante el vínculo que creó con ellas que es de los recuerdos más grandes que imperan en su mente y siempre decide contarlo con mucha alegría, y yo siempre decido escucharlo atentamente comprobando la importancia que los animales representan para las personas y los beneficios que nos brindan, pues ellos son siempre parte de la familia.
Imagen cortesía de Meta AI
Y en ésta línea quiero compartirles qué, si bien los humanos estamos expuestos a padecer enfermedades que muestren un deterioro cognitivo como lo es el Alzheimer, los perritos cuando son mayores y sobre todo cuando viven en un ambiente con poca estimulación, también pueden llegar a padecer síndrome de disfunción cognitiva, el cual se muestra similar a los signos que mostramos los seres humanos, presentando problemas de memoria, atención, confusión, desorientación y alteraciones en el ciclo de sueño. Por ello al saber que nuestros compañeros perrunos también pueden padecer este tipo de trastornos, es importante mostrarnos pacientes y empáticos con ellos; cuando nuestro perrito se muestra confundido, tal vez ya no pone atención como antes o incluso pierda los hábitos que tenía regularmente como horarios de comida y sueño, es importante estar ahí para hacerlo sentir seguro y comprendido, tal como lo haríamos con un ser humano, que con un diagnóstico de Alzheimer.
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Si quieren conocer más información sobre el duelo en la enfermedad de Alzheimer¹ o sobre el síndrome de disfunción cognitiva canina², los invito a seguir los enlaces que vienen al final de artículo.
Para finalizar quiero dejarles este mensaje: “tanto nosotros como nuestros perritos podemos atravesar por procesos de disfunción cognitiva, y estar bien informados sobre el tema nos dará mayores herramientas para acompañar en este proceso a quien o quienes lo necesiten”, por ello te invito a que sigas nuestro boletín y así seguir Conectando Huellas…
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¹https://doi.org/10.12804/revistas.urosario.edu.co/apl/a.8436
²http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0122-02682010000300014
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