El PROCESO DEL DUELO TIENE UN IDIOMA PROPIO

 

EL PROCESO DEL DUELO TIENE UN IDIOMA PROPIO

Imagen cortesía de pexels

El proceso del duelo tiene un idioma propio, entremezclado con dolor, con sufrimiento, con asuntos pendientes, con preguntas sin respuesta, pero también con esperanza, con anhelo de sanar. Y en este espacio queremos compartir este idioma, aclarando términos, conocimientos adquiridos por experiencias vividas y por muchos años de preparación. Iniciamos pues el recorrido…

Se habla mucho del Duelo, todos en algún momento de la vida lo hemos vivido, lo viviremos, o quizás estemos pasando en estos momentos por este difícil episodio consciente o inconscientemente.

Pero ¿lo identificamos? ¿Sabemos cómo lidiar con él? ¿Conocemos cuáles son sus signos, síntomas y consecuencias?.

¿QUÉ ES EL DUELO?

Imagen cortesía de pexels

El inicio del camino del Duelo, es una Pérdida.

Entonces hablemos en principio de lo que es una Pérdida: Algo que teníamos o creíamos que teníamos y que dejamos o vamos a dejar de tener: algo que se nos escapa, o del que hacemos mal uso o que dañamos o perjudicamos o que nos daña o perjudica, también es algo que queremos y no tenemos u algo que deseamos y nunca tendremos.

Las pérdidas son inevitables, forman parte de nuestra vida, están presentes día a día. Se origina tras una experiencia que desencadena una situación de separación.

Los seres humanos necesitamos pertenecer y que algo nos pertenezca, aunque sólo sea en apariencia. La pérdida se origina cuando esto desaparece.

Hay muchos tipos de pérdidas, conocemos algunas:

Pérdidas Materiales que tienen que ver con la posesión de cosas, objetos, joyas, dinero, bienes inmuebles etc. Por ejemplo cuando nos roban, cuando hay un incendio, cuando olvidamos algo. Resultado de desastres naturales como terremotos, inundaciones, etc.

Pérdidas relacionales que involucran al otro como: amistades, amores, parejas, compañeros de trabajo, familiares, animales de compañía, compañeros de escuela, maestros, etc.

Pérdidas intrapersonales , que tienen que ver con nosotros mismos o con nuestro cuerpo: salud, capacidades físicas, intelectuales, habilidades, destrezas, percepciones, memoria, vida, etc.

Pérdidas Evolutivas que van de la mano con los cambios en nuestro Ciclo Vital,son pérdidas que van desde la infancia a la adolescencia, en la juventud, adultez hasta la tercera edad.

Pérdidas del Territorio , directamente tienen que ver con el lugar que ocupamos, País, Ciudad, Colonia, Casa, Familia, Trabajo, etc.

Pérdidas Personales tienen que ver con ideales, sueños, proyectos, expectativas, desengaños, habilidades personales, creencias, identidad, fe, confianza, autoestima, seguridad y el propio sentido de vida.

Imagen cortesía de pexels

Hay pérdidas de todo tipo y afectarán a las personas según el grado y tipo de apego que se tiene con el objeto o la persona perdida. Afectan en diferentes grados y en las diferentes dimensiones del ser humano.

Pérdida Significativa: cuando lo perdido representa un valor o tiene una gran importancia en la vida de la persona. El grado de significado depende totalmente de la misma persona, por lo que no hay una pérdida más importante que otra. El valor es subjetivo y no comparable. Por ello, podemos afirmar que toda pérdida es significativa. Por ejemplo, si un pequeño pierde una tortuguita, para él implica una pérdida enorme, y para los padres puede que no tenga significado alguno.

Cada pérdida significativa va a provocar una respuesta natural que se puede considerar como un proceso de adaptación llamada DUELO.

DUELO: conjunto de procesos biopsicosociales que siguen a toda pérdida.

DOLUS = Dolor

DUELLUM = Guerra, combate, desafío.¨

Este proceso tiene características que son generales para todos los tipos, pero el Duelo es un proceso personal, único, irrepetible aunque sea vivido por muchos al mismo tiempo, y depende de las estructuras emocionales, mentales, heredadas, aprendidas de quien los vive.

Es un tiempo que se requiere para poder asumir, identificar, resolver un sinfín de emociones, sentimientos, situaciones, contextos que se relacionan con lo perdido. Es un camino difícil, doloroso, a veces extenuante que hay que recorrer sí o sí para llegar a una resignificación y encontrar una nueva manera de vivir sanamente sin lo perdido, que requiere de elaboración y acompañamiento. El tener conocimiento, entender qué es lo que se está viviendo, aligera el viaje. 

Imagen cortesía de pexels

Existen tantos tipos de Duelos como dolientes hay, porque aunque tienen manifestaciones y características generales muy similares, cada doliente lo vive a su manera y le imprime un sello muy personal. Por eso es que ningún duelo es igual a otro. Además hay muchos factores que influyen en la manera de vivirlo. Alguno de ellos hijo:

El género, hombres y mujeres lo viven diferentes.

La etapa del desarrollo en que se vive, duelos en niños, adolescentes, jóvenes, adultos y adultos mayores son vividos con características propias.

El estado civil, el estrato socioeconómico, la cultura, las memorias, herencias, convicciones, religión, todo influye en cómo se encara el proceso.

El tipo de pérdida, los apegos, las circunstancias que rodean a la pérdida, el apoyo sociofamiliar, etc.

Hay muchas variables que iremos conociendo e iremos explorando al adentrarnos en el Idioma del Duelo.

El Duelo también tiene ciertas características que son útiles de conocer:

Es un PROCESO porque evoluciona a través del tiempo y el espacio.

Es NORMAL, es decir nos ocurre a todos sin importar la edad, el género, las creencias, la educación, aunque las formas de afrontarlo sean diferentes.

Es ÍNTIMO, subjetivo, cada persona responde ante una pérdida como mejor puede, con las herramientas que tiene, como lo ha aprendido.

Es DINÄMICO, el duelo no es lineal, hay cambios que se experimentan a lo largo del tiempo, subidas, bajadas, idas y venidas. Mejoras y retrocesos

Es SOCIAL también la sociedad participa con rituales culturales, sociales, religiosos, expresiones artísticas, etc.

Es ACTIVO, el doliente tiene un papel primordial en la elaboración de sus propias pérdidas.

Hemos ido hasta aquí encontrándonos con lo que nos dice éste idioma propio del Duelo de manera muy general. Aún nos falta mucho por decir y compartir. Ojalá que el ir leyendo lo que el Duelo nos dice sirva para aclarar dudas sobre lo que tal vez hemos vivido sin comprender. Recuerden… “sólo, deseamos ser luz en la oscuridad”. Hasta la próxima vez. 

Dra Claudia Martínez Vázquezmellado

T. Anna Velázquez