Vivir con un conejito By: Seidi Martínez
Vivir con un conejito
Por: Seidi Martínez Loera
Tener un conejo de mascota es poco común en México, sin embargo son estupendos animalitos de compañía, Mi nombre es Seidi Martínez y me gustaría compartir contigo lo que es “vivir con un conejito”.
Los conejitos tienen la característica de ser silenciosos si se les compara con perros o gatos, a menos que encuentren algo que les cause curiosidad y lo decidan morder o destruir, es ahí cuando los notamos y sabemos que “algo están haciendo”.
Al ser animales de presa su comportamiento es cauteloso, por lo que el mínimo ruido puede capturar su atención y ponerlos alerta, a veces se acostumbran a ruidos comunes de los hogares y en estos casos pasan desapercibidos. Algunos conejitos se sienten en confianza al poco tiempo de llegar y pueden dormir largas siestas, otros se tardan algún tiempo, a veces duermen con los ojos abiertos o cerrando únicamente el tercer párpado. Cuando están a gusto pueden echarse a dormir con el movimiento que se conoce como “flop”, tirándose de lado con los ojos cerrados, esto puede durar segundos o minutos.
La alimentación de los conejos se basa principalmente en el heno, de gazapos (Un gazapo es el nombre que recibe la cría del conejo o un conejo joven) hasta los seis meses el de alfalfa es el indicado, ya que aporta hierro para su desarrollo, a partir de la edad adulta (seis meses) se les puede dar de avena, festuca, o el más recomendado que es el Timothy, este al igual que el agua debe ser a libre disposición siempre. Como complemento se les puede dar ensaladas compuestas en un 80% de lechugas (menos la Iceberg) y complementarlas con otro tipo de hortalizas como espinaca, cilantro, menta, arúgula, acelga, hojas de zanahoria, etc. Consulta a tu veterinario los vegetales y hortalizas permitidos y la frecuencia con la que se pueden dar. En el caso de las frutas, éstas se deben dar a manera de premio, a partir de los seis meses, dos o tres veces por semana en cantidades muy moderadas.
Los conejitos son animales muy nobles e inteligentes, aprenden rápido las rutinas y saben identificar a las personas por el sonido de la voz y por el olor, también se acostumbran a quienes los alimentan, así comienzan a crear vínculos. Cada uno tiene su personalidad, así que si se tiene más de uno no se puede esperar que tengan un mismo comportamiento, al igual que nosotros, ellos tienen sus cosas favoritas, lugares, comida, caricias, etc.
El vínculo para con ellos se desarrolla como en todos los seres, por la convivencia y los cuidados, los conejos identifican a la persona que pasa más tiempo con ellos, quienes los alimentan, los cuidan y acarician, así te empiezan a reconocer y a querer.
Yo he tenido varios conejitos muy especiales e inolvidables, uno de ellos era Mike, no le gustaban mucho las caricias ni los abrazos hasta cuando empezó a enfermar , Galleta era todo lo contrario, siempre se dejó acariciar y cargar, además de Galleta bebé y Bonnie que son sus hijos.
Hace poco falleció Galleta y fue muy difícil, él significaba todo para mí, siento que nuestra conexión fue tan grande que cuando murió sentí que se murió una parte mía, los dos estábamos muy acostumbrados a la presencia del otro.
Al enfermarse él, yo también enfermé. No se si mi bebé estaba absorbiendo mis dolencias y mis emociones, yo estaba mal en los dos aspectos, más en el emocional. Al avanzar su enfermedad y sin tener oportunidad de curarse, tuve que tomar la decisión de dormirlo, no podía verlo sufrir más y yo ya estaba agotada, lloré tanto su proceso de enfermedad que el día que partió sentí alivio, obviamente no de felicidad porque quisiera que muriera, pero supe que él descansaría del dolor, con mucha tristeza, pero los dos podríamos descansamos.
He entendido que las cosas pasan como tienen que pasar, gracias a la primera sesión que tuve en el grupo de ayuda por pérdida de animales de compañía de Nacer al Cielo Tanatología, entendí muchas cosas.
Hoy sé, que he hecho por todos mis conejitos lo que está en mis manos por darles lo mejor: cuidados, alimentación y mucho amor.
Gracias por dejarme compartir con ustedes, cómo es vivir y perder a un conejito muy amado, quisiera despedirme con un párrafo de un poema que escribí para Galleta:
Galleta: Nos amamos entre miradas y silencios, tú me regalaste el amor más bonito que he tenido, después del de Dios y me has hecho ser mejor persona.
Por: Seidi Martínez Loera
Hola Seidi, gracias por compartir tu experiencia, yo tuve un conejito también como mascota y me acompañaba a la tienda como un perrito. Dicen que el perejil es muy dañino para ellos.
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